sábado, 18 de octubre de 2014

Un rencuentro volatil cap 31

Tan sorprendente anuncio hizo que Demi entrase a toda velocidad en el cuarto de baño para lavarse y arreglarse un poco.
¿Qué había querido decir Joe con que sus padres querían a Lili?
¿De verdad sus suegros se ofrecían a criar a la hija de Oleia?
Demi estaba atónita porque los Volakis no le habían parecido nunca personas cariñosas.
Y menos con los niños.
Salió del baño diez minutos después y se puso unos vaqueros y una camiseta negra pero no estaba dispuesta a arreglarse mucho más.
Joe ya había bajado al salón y cuando Demi se reunió con ellos, la señora Jones estaba sirviendo café mientras Eirene Volakis decía:
–Si te hubieras casado con Oleia cuando tuviste oportunidad… ella habría sido perfecta para ti, hijo.
Demi , colorada hasta la raíz del pelo, carraspeó para hacer notar su presencia y su suegra le dedicó una sonrisa totalmente falsa.
–No lo creo. Nos separamos cuando yo era muy joven porque éramos incompatibles – dijo Joe.
–Siempre nos gustó mucho Oleia – insistió Petros Volakis, como si Demi no estuviera allí – Ésa es una de las razones por las que nos gustaría criar a su hija.
–En estas circunstancias, no creo que tu mujer la quiera – comentó Eirene, sin el menor pudor.
–Lili es hija de Joe – dijo Demi .
Eirene enarcó una ceja.
–La niña estaría mucho mejor con nosotros. Yo siempre quise tener una hija… cuando me quedé embarazada de Joe estaba convencida de que sería una niña y fue una tremenda desilusión para mí que no lo fuese.
–Sí, ésa fue una gran desilusión – asintió Petros.
Demi no podía seguir mordiéndose la lengua.
–Y a ninguno de los dos se le ha pasado la desilusión, ¿verdad? ¿Por eso siempre favorecisteis a Titos? ¿Es por eso por lo que nunca tenéis nada bueno que decir sobre Joe ?
Él se quedó sorprendido por el exabrupto.
–Vamos a dejar esa conversación…
–Eres una maleducada – la reprendió Eirene Volakis.
–Mi mujer no es una maleducada – protestó Joe –  Además, me sorprende muchísimo que queráis criar a Lili a vuestra edad. De hecho, no me parece buena idea.
–Nosotros podemos darle todo lo que necesita para que algún día pueda ocupar su sitio entre la mejor sociedad griega – insistió la madre de Joe .
–Hay cosas más importantes – replicó Joe .
–Para mí no. Sería feliz con nosotros y, además, es nuestra primera nieta.
–No, en realidad mi hijo fue su primer nieto – les recordó Demi .
El padre de Joe tuvo la decencia de mirarla con gesto consternado, pero Eirene no parecía en absoluto conmovida por el recordatorio.
Demi vio que Joe estaba tenso y se preguntó si la propuesta de sus padres le parecería bien.
Un minuto después, la niñera entró con Lili en el moisés.
–Es hora de que conozca a mi nieta – dijo Eirene, acercándose a la niña. Pero enseguida se detuvo, sorprendida – ¿Se puede saber qué le pasa en la cara?
–Lili tiene un eccema infantil – respondió Demi .
–Es muy feo – dijo su suegra, haciendo una mueca de disgusto – ¿Se le va a quitar?
–A algunos bebés se les pasa enseguida, a otros no. Habrá que esperar – dijo Demi , conteniendo el deseo de tomar a Lili en brazos y apartarla de aquella bruja.
Joe tuvo que disimular una sonrisa al ver que sus padres se apartaban del moisés como si la condición de la niña fuera contagiosa.
–Siento mucho que no sea perfecta – les dijo.
Eirene frunció el ceño.
–No es una niña sana. Tal vez sería mejor que siguiera con vosotros por el momento.
–No pensaba dejar que os la llevarais, sana o no – replicó Joe – Oleia me confió a mi hija y tengo intención de criarla. El aspecto de Lili no tiene la menor importancia ni para Demi ni para mí.
Eirene Volakis no parecía impresionada.
Evidentemente, sólo una niña guapa y sana podía optar a un puesto en casa de los Volakis.
Demi intentó calmar a Lili cuando empezó a llorar pero, como de costumbre, era imposible.
En quince minutos, los padres de Joe se despidieron, su interés por la niña olvidado por completo.
Él se inclinó para tomar el sonajero y ofrecérselo a su hija.
–Te toca quedarte con nosotros – le dijo suspirando – Parece que ni siquiera podemos darte en adopción.
–No digas eso ni de broma – lo reprendió Demi .
–No es fea – comentó Joe entonces.
–¡Pues claro que no lo es!
–¿Pensabas que iba a dejar que mis padres se la llevaran? – le preguntó él.
Demi debía admitir que unos días antes habría pensado que sí.
–No, ya no. Además, no creo que tu madre sea capaz de ofrecerle a nadie un cariño incondicional.
–Nunca había admitido hasta ahora que esperaba que yo fuese una niña – comentó él sacudiendo la cabeza – Yo era el niño más ruidoso y más travieso del mundo. Es normal que la sacara de quicio.
Y seguramente había sido una de las pocas desilusiones que una mujer rica y mimada como Eirene Volakis había tenido que soportar en la vida, pensó Demi , dolida al pensar que Joe había sido un niño tan poco querido.
–Ahora entiendo que seas tan independiente.
–Volvamos a Londres mañana – sugirió él entonces, cambiando de tema – Desde ayer, los paparazzi están ocupados persiguiendo a un político al que han pillado con una amante. Lili ya no es noticia, afortunadamente.
–Así sería más fácil volver al trabajo – reconoció Demi – Tardo mucho tiempo en llegar desde aquí.
Al darse cuenta de que estaban, de nuevo, hablando como dos extraños, sus ojos se llenaron de lágrimas y Demi tuvo que parpadear varias veces para controlarlas.
En Marruecos, ella había sido la primera en dar el paso para romper la distancia entre ellos, pero no estaba preparada para hacerlo de nuevo.
Joe no la amaba y lo mínimo que podía hacer para no perder su dignidad era mantenerse firme.
No le dijo nada sobre la posibilidad de un embarazo.
Esos días felices en Marruecos cuando la idea de tener un hijo los había llenado a los dos de felicidad, habían terminado.

Y después de haberle dicho a Joe una vez que esperaba un hijo cuando él no lo deseaba, no quería volver a verse en esa situación.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

si te gusto el capitulo o tienes alguna sugerencia no dudes en decirmela seran todas bienvenidas gracias C:
besitos vuelve pronto y mil gracias por visitarme ♥