sábado, 22 de diciembre de 2012

wife by accident cap 28



Caroline seguía tan morena como cuando volvieron de las vacaciones.
Llevaba un sofisticado traje pantalón blanco que habría resultado más adecuado para un cóctel que para una muestra floral.

—¿Cómo estás? —preguntó Demi débilmente.

Al menos su voz sonó firme.

—Muy bien — Caroline la miró de arriba abajo con sus felinos ojos verdes. Una lenta y burlona sonrisa curvó sus voluptuosos labios — Veo que hay que felicitarte.

¿De verdad había creído que no se daría cuenta?
pensó Demi sintiendo que de pronto le faltaba el aire.

—Gracias —susurró.

—¿De cuántos meses estás?

—De cuatro ...

Demi trató de sonreír como si aquello fuera algo rutinario para ella pero sintió que todo su cuerpo se tensaba.

—Ya veo — Caroline le dedicó una de sus duras y brillantes miradas —¿Y dónde está tu marido? ¿Aquí contigo?

Demi no contestó.
¿Qué podría haber dicho?

—¿Te gusta la feria? —preguntó con cierta brusquedad.

Caroline se encogió de hombros.

—Lo normal —contestó—. La verdad es que he venido con mi madre. Le encantan esta clase de cosas y se ha empeñado en que viniera a ayudarla.

—Bueno… espero que lo pases bien

«¡Dios santo qué conversacióntan insustancial!» pensó Demi  que lo único que quería era irse y que Caroline no sumara dos y dos

— Ahora tengo que irme… - trato de decir demi

—Probé suerte con Joe pero no se mostró interesado. Creo que tenías razón cuando dijiste que me consideraba demasiado joven… apesar de mis intentos por persuadirlo de lo contrario

 Caroline sonrió con la misma sonrisa repelente que tanto desagradó a Demi durante las vacaciones

— Pero en cierto modo me alegro de no haberlo conseguido. Joe me dejó bien claro que no estaba interesado en una relación a largo plazo con ninguna mujer. Fue muy amable y delicado al respecto. Personalmente creo que el matrimonio sólo sería un agobio para su estilo de vida ¿no te parece?

Demi se encogió de hombros sin decir nada.
Caroline se inclinó confidencialmente hacia ella.

—Se me ocurre una cosa… — dijo en tono mordaz sin dejar de sonreír — Estás embarazada de poco más de cuatro meses. Joe podría ser elpadre, ¿no? Si tuvisteis una aventurilla… ¡No digo que la tuvierais! Pero las fechas coinciden ¿no? Si la prensa descubriera que ha tenido un hijo ilegítimo del que no se ha responsabilizado… ¡menuda se armaría! A fin de cuentas algunas de sus campañas publicitarias más importantes están basadas en férreos principios morales. ¡Sería toda una faena!, ¿no teparece? A pesar de todo…

Caroline simuló mostrase seriamente pensativa antes de continuar

—… creo que podría resultar bastantedivertido bajarle un poco los humos. El rechazo no es una palabra que entre en mi vocabulario.

—Estoy segura de que no quieres decir eso Caroline —dijo Demi sintiendo un creciente horror ante las implicaciones de lo que la otra mujer acababa de decir— Estoy segura de que no eres una persona vengativa.

—¡Por supuesto que no! Pero siempre hay algo dulce en la venganza ¿no te parece? Por cierto antes no me has contestado ¿estás casada?

Alguien empujó a Demi en ese momento por detrás y ella se sintió intensamente agradecida hacia el desconsiderado desconocido.

—Debo irme — dijo mirando valientemente a los ojos de Caroline sin apartar la mirada— Estoy estorbando a la gente que quiere ver el puesto de tu madre. Felicítala de mi parte. Tiene una selección de flores maravillosa.

—Se lo diré desde luego —Caroline se apartó para dejar pasar a Demi — Y también le diré cuánto le agradezco que se empeñara en hacerme venir. De lo contrario no nos habríamos visto ¿verdad Demi ?

Ya no tenía sentido tratar de seguir disfrutando de la muestra pero Demi recorrió el resto de los puestos tomando notas.

Cuando volvió a supiso estaba agotada.
Su mente repetía una y otra vez la conversación con Caroline.
Lo mirara como lo mirara no había forma de pasar por alto las insinuacionesque había tras sus palabras.

Caroline quería vengarse de Joe .
Su intento de conquistarlo había sido un fracaso y como ella misma había dicho el rechazo no era algo que asimilara fácilmente.

¿Qué mejor venganza que ver a Joe forzado a aceptar una paternidad que no quería?
Demi no durmió esa noche.

No dejó de dar vueltas imaginando mil posibilidades tratando de convencerse de que estaba siendo tonta de que las palabras de Caroline sólo habían sido una vengativa amenaza.
Pero no le sirvió de nada.

Cuando finalizó la semana se dio cuenta de que estaba esperando.
Esperando a que el teléfono sonara esperando acaer por el borde de un precipicio.

Cuando pasaron dos semanas empezó a ilusionarse pensando que tal vez Joe había perdido sus señas y que nunca la encontraría através de la guía telefónica pues no aparecía en él.
Trató desesperadamente de recordar si le había dicho dónde trabajaba pero le fue imposible hacerlo.

Cuando pasaron tres semanas dejó de mirar el teléfono con la cautela de alguien esperando lo peor.
El otoño había alejado los últimos vestigios del verano.
Las hojas de los árboles empezaban a volverse amarillas y rojas y a caer al suelo.

Demi sacó su ropa de invierno y comprobó que apenas nada le sentaba bien.
Tuvo que guardar todos sus pantalones y empezar a coser algunas prendas adecuadas a su estado cosa que hizo por obligación sin ninguna alegría.

Dejó de preocuparse por Joe porque no tener noticias de él era una buena noticia.
Dejó de repasar obsesivamente su conversación con Caroline porque si ésta tenía intención de crear problemas a esas alturas ya lo habría hecho.

También dejó de sobresaltarse cada vez que el teléfono sonaba como si temiera que fuera a saltarle al cuello convirtiéndose de repente en alguna monstruosa criatura salida de una película de terror.


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