-Dios sabe que Liam se merece una explicación! - exclamó Janice Gomez irritada -. Te has comportado fatal. Todo el mundo habla del asunto... y ¿qué crees que van a pensar los Hermsworth? ¡Ellos te han tratado como a una hija!
-Lo siento -susurró Miley agitadamente.
-Me mentiste. ¡Me dijiste que Liam y tú habíais decidido que no os podíais casar; no tuviste la decencia de decirme que había otro hombre!
Miley había pensado no decir nada, si no discutía, aquello pasaría antes.
Pero, después de los tres espesos días de recriminaciones que siguieron a la publicación de esa maldita foto suya con Nick, esa creencia iba siendo cada vez más débil.
A Miley no se le había ocurrido cuando abandonó Londres para refugiarse en casa de su tía que le iba a tocar jugar el papel de culpable. Liam estaba haciéndose el mártir, el inocente, la estaba dejando a ella llevarse todo el peso de la artillería.
-Déjalo ya, mamá - dijo Selena apareciendo en la puerta de la cocina sonriendo brillantemente -. Por lo menos no habíamos mandado las invitaciones de boda.
-Voy a por la colada - dijo Miley entonces.
Cuando salió por la puerta trasera dio una poderosa bocanada de aire fresco. Dentro seguían las recriminaciones de su tía.
-Al parecer, la sangre de su madre ha salido a la luz. Nadie puede decir que yo no haya tenido cuidado criando a Miley... - dijo janice
Miley se apartó de allí y empezó a quitar la ropa de la cuerda.
Estaba allí, absorta en sus pensamientos cuando una voz dijo a sus espaldas
-Ya sabía que no contarías nada.
Miley se dio la vuelta rápidamente y se encontró con su prima Selena a pocos metros.
-Sólo porque creo que no serviría de nada.
Selena se rió.
-Liam ni siquiera me habla. Sigue pensando que fui yo la que hizo esa llamada telefónica.
-Por supuesto que fuiste tú.
-¡No fui yo! Alguien que sabía lo de Liam y yo, evidentemente, decidió que sería divertido hacértelo saber. Tal vez alguien que trabaje con él, que nos vio juntos. No lo sé... ¡Pero no fui yo!
A Miley no le importaba nada en ese momento quién había hecho la llamada, pero le resultaba divertido de alguna manera la forma de defenderse de su prima.
Era culpable de haberse acostado con Liam y de no tener el menor sentimiento de culpa por ello, pero no de haber hecho esa llamada.
-Cuéntame la verdadera historia con Nick Jonas.
-¿Por qué?
-No me vendrían mal unas risas para animarme el día. Mamá tiene que estar loca para imaginarse que puedas haberle llamado la atención a Nick y, ¡Mucho menos, haberte llevado a su casa a pasar la noche! Nick ni siquiera me dio la hora a mí cuando lo conocí. ¿Por qué te crees que me lié con franki? Me apuesto cualquier cosa a que lo más íntimo que hiciste con él fue tomarle un dictado mientras desayunaba.
Miley se volvió hacia la pared y se agarró a ella.
Pensó en todos los años que había desperdiciado tratando de ser amiga de Selena y se preguntó por qué lo había intentado.
Selena nunca la había perdonado el que le hubiera privado de ser la hija única y eso lo había demostrado últimamente acostándose con su novio.
-¿Por qué lo hiciste? -le preguntó Miley sin esperarse realmente una respuesta.
-Liam no te ama a ti, sino a mí... ¡Pero no tiene el valor de admitirlo! - dijo Selena, poniéndose súbitamente a la defensiva.
Miley se volvió lentamente, su rostro reflejaba la sorpresa.
-Su madre me odia. Cree que soy una cualquiera. Liam también lo cree. ¿Por qué te crees que se fue contigo? Me quiere, pero no me quiere, así que jugó a lo seguro.
Dándose cuenta del amargo resentimiento que había en los ojos de Selena, Miley se sorprendió más aún.
Irónicamente, no se le había ocurrido que Liam le importara realmente a su prima.
Había dado por hecho que todo ese episodio no había sido más que otra demostración de la necesidad de su prima de destruir cualquier cosa que ella valorara.
Un acto de desprecio y superioridad.
-Pero sólo hay una cosa de la que yo quiero hablar - continuó Selena, enfadada -. Liam está actuando como un beep, persiguiéndote, negándose a tener nada que ver conmigo, pero eso es sólo porque se siente culpable. Libéralo del anzuelo. Dile que lo comprendes y que aceptas que vuestro compromiso ha terminado. No quiero que se sienta atrapado conmigo.
-¿Atrapado?
-Creo que puedo estar embarazada.
Aquello fue como si Miley recibiera un puñetazo en el estómago.
Se quedó pálida.
En un momento supo que su dolor no había terminado todavía.
Había afrontado cara a cara la traición de esos dos, pero aún así el concepto de Selena embarazada de Liam la ponía enferma.
Se había esperado ser ella la que llevara un hijo de Liam.
-¡Y no se lo voy a decir hasta que no deje de hacer el estúpido contigo!
-¡No! No hay ninguna razón para que nadie sepa que me han pillado. Tú te vuelves a Londres, yo me dedico a consolar a Liam y luego desapareceremos marchándonos a alguna playa sin hacer ruido. Todo el mundo pensará que somos muy impulsivos, pero dudo que alguien piense que se trata de unas prisas.
-Lo tienes todo pensado.
-Liam es mío - dijo su prima con énfasis -. No puedo decir que lo siento cuando no es así. Pero sí que te puedo asegurar que no fui yo la que hizo esa llamada telefónica.
Miley se rió histéricamente.
Selena no sólo se esperaba que le sacara las castañas del fuego, sino que además tenía que interceder por ella ante Liam.
Su prima no estaba tan segura de Liam como quería estarlo.
Pero entonces, ¿por qué se había quedado embarazada?
Eso, dada la experiencia de Selena, era de lo más improbable que fuera un accidente.
Cielo Santo, ¿desde hacía cuánto que se llevaban viendo a sus espaldas?
ok... odio a Selena, que arrogante!
ResponderEliminarNo la odio personalmente
solo el personaje de esta historia
en realidad no odio a nadie
jajaja
hahah
gracias Mayi de nuevo... sigo con los otros caps