martes, 20 de noviembre de 2012

La prometida del desierto cap26


Sin ninguna advertencia Nick le apretó el hombro.
—Párate. Este no es el lugar adecuado para una disputa... De hecho, ¿cual es el sitio adecuado para ninguna disputa? Ahora eres mi mujer.

Su mujer. 
El estómago le dio un vuelco. 
¿Su mujer? 

—No me avergüences delante de mi familia —le advirtió Nick con los ojos brillantes de fiereza—. Porque no te lo perdonaré nunca, ni ellos tampoco. Esta es una ceremonia muy seria. ¿Dónde está tu respeto'?

Ella se puso mortalmente pálida. 

—Pero yo no sabía... No me había dado cuenta... 

—¿No te lo dije yo? 

—Bueno... sí, pero no te creí. 

—Pues créeme ahora. 

—¡No quiero!

Las piernas le temblaron y el aturdimiento no remitía sino que cada vez era más profundo. 

—Entonces, ¿por qué te quedaste? ¿Por qué no te fuiste al aeropuerto? 

—No pensaba que hablaras en serio... no hoy, ni aquí. No en una ceremonia como esa
¡Oh Dios! ¿Por qué había estado tan ciega? 

—¿Qué tiene de malo? 

—Nada... pero pensé que...que pretendías algún tipo de contrato... 

—¿Algún contrato? 

—Selena me dijo... 

—¿Qué te dijo Selena? 

—Bueno, que no pensabas en una boda de verdad sino en un acuerdo temporal. Y me contó los de esa práctica llamada muta. 

—Muta — susurró Nick — En Datar no son legales esos arreglos porque dan lugar a muchos abusos. Nuestras reglas para el matrimonio están fijadas por ley y son iguales que en tu país.

-¡Oh! 

—¿Si te hubiera contado que yo era un asesino en serie también te lo hubieras tragado? — Nick soltó una carcajada de desdén — Siento decepcionarte, pero estamos casados de verdad y ahora tendrás que darme una respuesta satisfactoria de por qué dejaste que el helicóptero se fuera sin ti.

Miley tenía la mente completamente en blanco. 

—¿Por qué? - insistio

—¡Creí que había sido un acceso de locura temporal!

Las fuertes facciones de él se hicieron impenetrables.
Entonces ante el murmullo de voces que venía de fuera dela tienda torció los labios. 

—Y aún te sentirás más casada para cuando termine el día — predijo al separarse de ella. 

—¿Y qué se supone que quiere decir eso? — preguntó Miley temblorosa —. Yo...

Se interrumpió cuando entró un hombre con un collarín clerical Disculpándose por su tardanza y seguido de un hombre y una mujer elegantemente vestidos. 

—¿Puedo presentarte al reverendo Wilkins, capellán del Hospital Real? — dijo Nick  sin ninguna expresión en el rostro — Mi hermana Demi y su marido, Joseph, que han aceptado generosamente ser nuestros testigos.

Clavada como si estuviera enraizada a la tierra Miley se encontró estrechando la mano del ministro del cuñado de Nick y recibiendo un abrazo de la sonriente mujer. 

—La culpa de la tardanza es mía y de Joe — le dijo Demi a Miley — Deberíamos haber llegado por la mañana, pero como siempre pasa en el mundo médico los mejores planes se estropean ante una urgencia. Ya sé que Nick quería que la ceremonia fuera al contrario y se supone que yo debía estar aquí para hacer a Miley sentirse como en casa... Me temo que Zulema no sea una intérprete muy aceptable ante los ojos de la vieja generación. Son todas unas snobs. 

Joseph se adelantó y apoyó una mano en la espalda de su mujer. 

—¿No crees que deberías dejar la palabra al señorWilkins? — murmuró con un bufido — Ya aprenderás,Miley  que mi mujer casi nunca se detiene a tomar aliento cuando empieza a hablar.

Miley esbozó una sonrisa tensa. 
Nick había pretendido que la ceremonia en inglés tuviera lugar antes que la árabe y si eso hubiera pasado, ella hubiera sabido lo que estaba pasando y hubiera podido impedirlo...

 Pero ¿lo hubiera hecho? 
¿Hubiera tenido el valor de anularlo en presencia de su familia?

Dios santo, hubiera causado un tumulto por no mencionar la humillación de inmensas proporciones para Nick ... 
No, no creía haber tenido el valor de hacerle aquello. 

—¿Podemos proceder? — apremió animoso el reverendo.

Cuando Nick había dicho que aún estarían mas casados al terminar el día no había estado exagerando. 

El servicio fue el tradicional. 
Miley dio las respuestas temblorosa y cuando Nick le tomó la mano para ponerle el anillo estaba más rígida que un reloj e pared. 
Cuando tuvo que firmar, le tembló la mano. 

¡Que ardiera en el infierno!
Cuando estuvieran a solas iba a enterarse. 

—Me encanta tener otra mujer liberada en la familia — se rió Demi cuando el ministro empezó a charlar con Nick — Yo tuve que casarme para ganar mi libertad y nuestro padre todavía se está recuperando del susto de que mi excéntrica afición según él se haya convertido en un acarrera. 

—¿Eres cirujana? —preguntó Miley . 

— Soy ginecóloga. No me quedaba realmente mucha elección. Los hombres de Datan son muy machos, pero correrían como alma que lleva el diablo si tuvieran que enfrentarse con una mujer médico. Pero cuando comprenden que hay una doctora para las necesidades más íntimas de su mujer, aceptan encantados de que practiquemos la profesión. Estoy muy contenta de que formes parte de nuestra familia, Miley — dijo con una sonrisa sincera— Y siento haberte hecho esperar tanto. 

—Es hora de que nos vayamos —interrumpió de forma abrupta Nick 

—¿Por qué te has ataviado de príncipe coronado? — preguntó Demi con un repentino fruncimiento de ceño. 

—¡Demi! 

Joe estaba sonrojado consciente de la falta de ambiente festivo.
La hermana de Nick  dirigió a Miley una mirada insegura e interrogante sin ocultar su preocupación. 
Miley se sonrojó de incomodidad. 

—Nos veremos pronto. Espero que seáis nuestros primeros visitantes —susurró Nick en voz muy baja.


1 comentario:

si te gusto el capitulo o tienes alguna sugerencia no dudes en decirmela seran todas bienvenidas gracias C:
besitos vuelve pronto y mil gracias por visitarme ♥