domingo, 18 de noviembre de 2012

Dama de treboles cap 50




Desde que vivía en Indian Creek Miley había conseguido aficionarse al café.
El lunes por la tarde, ante una taza humeante, escuchaba sin perder detalle el relato de su cuñada.

   —Él nació cuando mi hermano Sean ya había muerto. Yo tenía diez años y casi se crió como hijo único. No pienses que fue un niño solitario, había muchos chicos en Indian Creek y en casa todos estábamos pendientes de él. Tal vez demasiado pendientes — añadió pensativa.

   —Pero no tuvo hermanos con quien jugar, compartir secretos, pelearse… Esas cosas que hacen los hermanos, supongo.

Ella tampoco los había tenido y entendía ese tipo de soledad.

   —Te aseguro que fue el niño más feliz del mundo. Fue un regalo inesperado. Mis padres eran ya mayores. Imagínate, de repente un bebé en el rancho. Para mi padre fue un soplo de vida. Había perdido a su único hijo varón y el Cielo le enviaba otro. Fue durante años el juguete de la casa.

Miley  pensó en aquel niño que, sin saberlo, había venido para ser la ilusión de sus padres y también para sustituir al hijo perdido.

   —¿Se parece a Sean?

   —Mucho, todos nos parecemos bastante. Me refiero a los Jonas, porque mis hijos se parecen más a su padre.

   —¿Y en el carácter?

   —No sé qué decirte, yo era una niña y a Sean lo recuerdo siempre tan sonriente… A veces pienso que el carácter sombrío de mi hermano se fraguó porque siempre se sintió a la sombra de Sean. Mis padres no paraban de repetir que él sería el dueño del rancho al no estar nuestro hermano. Creo que cargamos demasiadas responsabilidades a sus espaldas.

   —Debió de ser duro para él perder a vuestro padre — dijo Miley con dolor en la voz.

   —No te imaginas cuanto. Tenían una relación excepcional. Un día, Nick llegó de la escuela y lo vio en su mecedora, corrió hacia él creyendo que dormía, pero había muerto. Dijeron que su corazón se habla cansado de latir. Nick tenía entonces quince años.

A Miley se le hizo un nudo en la garganta.
Imaginó a aquel niño al que, como a ella, la vida convirtió en adulto antes de tiempo.

Emma era consciente de estar pisando un terreno que no le correspondía.
Pero deseaba con todas sus fuerzas la felicidad de su hermano.
Miley tenía que saber lo que supuso para él quedarse a cargo de las ilusiones de su padre a una edad tan temprana.

   —Cuando llegó el doctor nada se pudo hacer. Mi padre había muerto feliz, contemplando lo que había creado con tanto trabajo. Para nosotros fue un consuelo. Mi madre era mayor y a esa edad se espera la muerte de una manera diferente. Y yo ya estaba casada y con dos niños, tenía mi propia casa. Para Nick fue mucho más duro. Resultó terrible tener que separarlo del cuerpo de mi padre. Permaneció abrazado a él toda la noche, hablándole, pidiéndole que no se marchara.

Tuvo que detener el relato por un instante porque la emoción le impidió continuar

— Creo que por eso no le quedan lágrimas: aquella noche las derramó todas.

Miley trató de retener el llanto.
Ella también sabía lo que era perder a los seres queridos.

   —Cuando se hizo de día, Matt, con mucho cariño, le anunció que se acercaba el momento de la despedida. Ya hacía rato que había dejado de llorar. Muy serio, salió de la habitación y al instante oímos ruido fuera. Matt lo encontró tallando un trébol en la tapa del ataúd.

   —Un shamrock — recordó Miley

Le explicó que lo hacía para que supiesen que era un irlandés.
Así podrían enviarlo junto a sus padres al llegar al Cielo de los irlandeses y siempre estaría con ellos.

Una lágrima resbaló por la mejilla de Miley,
Emma también tenía los ojos anegados.

   —Nunca he vuelto a ver tanta pena en los ojos de Matt. Mi hermano no volvió a soltar ni una lágrima. Durante el entierro y a la hora de las condolencias, se comportó como un adulto. De vuelta a casa de mis padres, desapareció. Mi madre no quiso lutos. Era una mujer única, decidida a vivir sin tristeza, como era el deseo de mi padre. Pero estaba preocupada por mi hermano, las dos lo estábamos. Mi esposo dijo que sabía dónde encontrarlo. Un par de horas más tarde, regresaron los dos. Matt le rodeaba los hombros con el brazo. Fue como si la vida empezase para él de nuevo.

—¿Qué paso en esas dos horas? ¿Dónde estuvo? — preguntó Miley enjugándose la mejilla.

—No lo sé. Nunca le he preguntado a Matt, ni él me lo ha contado. Es algo entre ellos

Miley admiró a su cuñada.
Así eran los Jonas.

—Tuvo que hacerse cargo del rancho siendo apenas un niño. Mi madre se fue tres años después.
También entonces talló un shamrock para que pudiese encontrar a mi padre en el Cielo — dijo secándose una lágrima — Hace once años que está solo. Es cierto que en el rancho todos lo quieren y respetan, pero hasta ahora lo único que ha tenido es mucho trabajo y una casa vacía.

   —Entonces, ¿por qué nunca se casó?

Miley no entendía que hubiese permanecido soltero hasta esa edad.
Emma se removió nerviosa.
Comprendía la curiosidad de su cuñada, pero era a su esposo a quien debía formular esa pregunta.


—¡Ay, Miley ! — Cabeceó con una sonrisa triste — Escúchame bien: tienes que prometerme que nunca le dirás a mi hermano que yo te lo he contado.

   —Te lo prometo. Se que para ti no es fácil hablarme de él.




2 comentarios:

  1. wooooooooooooooooow me encantoooooooooooooooo
    porfiiiiss siguelaaaaaaaaaaaaaaa
    quieroo saber que pasaaaaaaaaaaa

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  2. AME ESTE CAPII
    siguela!!
    PLEASE :)

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si te gusto el capitulo o tienes alguna sugerencia no dudes en decirmela seran todas bienvenidas gracias C:
besitos vuelve pronto y mil gracias por visitarme ♥